La primera camiseta tendrá -como no podía ser de otra forma- el rojo como color principal y detalles en blanco y verde. El Liverpool cambiará de marca y deja New Balance para ser parte de la familia de Nike. El modelo titular lleva el clásico diseño a mitades del equipo, pero la división entre el naranja y el rojo es a través de un efecto brochazo que intenta reproducir el fuego de los fanáticos.